sábado, 26 de marzo de 2016

Carmen Moreno presenta su libro «Sherlock Holmes y las sombras de Whitechapel» en el Cafe Teatro Pay Pay.


El pasado día 10 de marzo pudimos asistir a la presentación del nuevo libro de Carmen Moreno, Sherlock Holmes y las sombras de Whitechapel, de la Editorial Licenciado Vidriera. Este acto continúa con el programa de actividades literarias de La Consejería de Cultura, a través del Centro Andaluz de las Letras (CAL).

El acto se realizó en el Café Teatro Pay Pay (Calle Silencio, 1. Cádíz) a las 19:30 y pudimos contar con la colaboración interventora de Rafael Marín.

Formalmente decimos que fue el acto de presentación de un libro; no está mal presentar la premisa de tal manera, pero sí nos hace tener la mosca detrás de la oreja a sabiendas de lo que presenciamos allí: fue un acto de personalidades para nada personales. Es decir, un acto con vocación a tertulia.
Se dio el caso gracias a la ambientación creada por el Pay Pay: luz cobriza y tenue junto a una gran disponibilidad de asientos que fueron cubiertos en mayor parte por la zona central frente al escenario.

La fría cerveza o la copa temprana, propiciaron unido a la gracia gaditana, un intercambio de pareceres con el mayor desparpajo y simpatía que uno pudiera desear. Y destacamos que se antojaría ilusorio en otras circunstancias escuchar a los más gaditas del lugar hablar con tanta soltura sobre el Londres victoriano, pero estábamos en el Pay Pay, donde reza uno de sus eslóganes: «Déjense pervertir por el Pay Pay».

Nos dejamos pervertir de una forma un tanto sádica, ya que entre realidad, fantasía o realidad fantaseada, Carmen Moreno y Rafael Marín, destacaron las dotes de Jack el Destripador para hacer de tal despropósito cometido, un puzle sin resolver. Y ante tal rompecabezas, se nos presenta el «cabesa», que diríamos en Cádiz, el cual no es otro que Sherlock Holmes.

La obra, para no ser destripada, quedó en un segundo plano para poder centrarnos en la propia vida del escritor Arthur Conan Doyle, que resultó ser para los bisoños, inquietante e interesante, dada la ávida curiosidad que despertaba en la mirada de los asistentes cuyas bocas se entreabrían (lejos del bostezo) ante la singularidad de los comentarios de Carmen Moreno y Rafael Marín.

Primero acto, luego tertulia y finalmente velada deliciosa; acabó de una forma sencilla y sincera, con un público agradecido y una autora aún más agradecida al advertir nuestras sonrisas entre la delicada luz del Café Teatro Pay Pay.


jueves, 25 de febrero de 2016

Literatura español y gestión cultural 1.

Mi ciudad posee un valioso patrimonio cultural. Muchos artistas nacieron aquí y a otros tantos se los homenajea. Naciendo en El Puerto de Santa María, es muy sencillo sentirse orgulloso, por ejemplo, al ir a estudiar, puesto que nuestra biblioteca pública es la Biblioteca Alfonso X El Sabio. Tras estudiar, puedes hacer un pequeño descanso en el Café-Galería Blanco & Negro, donde además de tomar un gran café y disfrutar de buena, podrás ver exposiciones de creadores de El Puerto de Santa María o alrededores, que se sienten muy unidos a esta casa. Mientras te tomas el café, puedes encontrarte con jóvenes artistas de la ciudad, como el ilustrador Alejo Malia, con el cual siempre me doy un abrazo y me doy el gusto de compartir diferentes visiones sobre la pintura, el cine, las letras y la música. Si hablamos de cine, no es de extrañar que por allí se encuentren los creadores del Shorty Week. Se trata de personas cercanas que a base de cortos de todo el mundo, nos emocionan y arrancan la carcajada. En B&N se reúnen cada año para visualizar cortos muchísimas personas y cada año podemos encontrar a más personas allí.

Tal vez este no sea el patrimonio al que estamos acostumbrado, pero es el que está naciendo. Es diferente, quiere experimentar y quiere, sobre todo, crear desde El Puerto de Santa María hacia los portuenses y luego, al mundo.

domingo, 22 de junio de 2014

Disparates de Goya



Tiene lugar durante el I Congreso Liberal, organizado por la Universidad de Cádiz, la disertación de D. Juan Carrete Redondo quien expone la serie de obras quizá más difícil de explicar de Francisco de Goya, los Disparates (o Proverbios) realizados entre los años 1815 y 1823, se trata de 22 obras gráficas grabadas por el pintor en una época que podemos denominar de “terror”.
Goya, de tendencias liberales reconocidas se encuentra en una encrucijada. Estando Fernando VII en el trono no podía permitirse los problemas que acarrearía apoyar a José I. Liberales y conservadores se alzaban en una contienda representando el miedo y la esperanza, un futuro incierto. Es esto precisamente lo que se ve representado en los grabados de Goya.
Se ve en las imágenes representaciones fantasmagóricas y violentas, muestras de la opresión del poder en unas y dismitificación de estas fuerzas opresoras en otras.






La Regenta capítulo XXVI



«El jueves Santo llegó con una noticia que había de hacer época en los anales de Vetusta, anales que por cierto escribía con gran cachaza un profesor del Instituto, autor también de unos comentarios acerca de la jota Aragonesa. 
En casa de Vegallana la tal noticia estalló como una bomba», hasta:


«Una hora antes de obscurecer salió la procesión del Entierro de la iglesia de San Isidro».

Este fragmento de La Regenta (1884-85) se enmarca dentro del capítulo XXVI dentro de la segunda parte de la novela. Es decir se encuentra ya en el planteamiento del desenlace de la obra, apenas a cuatro capítulos del final, todas las descripciones posibles del entorno han sido ya realizadas y queda centrarse en preparar la tragedia final.
Nos encontramos en Semana Santa y en el palacio de los Vegallana donde tienen lugar numeroso encuentros a lo largo de la acción y donde más adelante Álvaro Mesía demostrará definitivamente su ventaja sobre el Magistral, pues conoce el terreno y no será la primera vez que firme una conquista en esa casa.

En casa de los Vegallana la noticia estalló como una bomba, no se trata de una expresión sin más, se trata de la reacción que provoca en la casa. Había bajo techo entonces cuatro mujeres: Rufina la mujer del Marqués, Visitación, Obdulia y doña Petronila. Cuatro mujeres de las cuales al menos tres de ellas querían ver hundida la moral de la Regenta. De la Marquesa se dice que es una mujer liberal y de actos escandalosos, con una fachada muy devota pero desprecia el sexto mandamiento (no cometerás actos impuros). De Visitación sabemos que su intención es ver a Ana tan hundida como lo está ella, quiere verla en brazos del hombre que un día la perdió a ella también. Obdulia es envidiosa, viuda y está muy bien relacionada en la alta sociedad vetustense, además de ella se dice que también fue amante Álvaro Mesía. Estas tres señoras tienen en común su obsesión por ver como Ana cae ante el que un día fue su amante, quieren ver como la impunidad y decencia de la que Ana es merecedora, se ensucia y se agrieta como un día les pasó a ellas. En un mundo de miseria espiritual como es el representado por las gentes de Vetusta y estas tres mujeres en este caso, no tiene cabida una persona como Ana Ozores, buena, pura, con ideales y algo ingenua. Es por eso que en esa sociedad corrompida todos quieren ver y ser partícipes de la caída de la joven.
En este fragmento en concreto encontramos como habla la envidia por sí sola.
En plena lucha por el poder de Vetusta, el magistral que había visto muy mermado su liderazgo debido a lo ocurrido entre Álvaro y la Regenta en el baile y también después de haberse descubierto ante Ana, ha encontrado la posibilidad de restaurar su hegemonía gracias a la conversión y muerte de Pompeyo, el ateo oficial de Vetusta, y gracias a la propuesta de Ana. El magistral demuestra así que sigue teniendo poder sobre Ana.
Desde el pueblo la iniciativa de Ana es vista como una amenaza, como un baño de masas para engrandecer su imagen y su ego, es por eso que las vetustenses más aristócratas lo ven como una señal de peligro. La regenta, que lucha entre la devoción mística y la necesidad de sentirse soñada, que todavía no ha caído en los brazos de un amante (algo que algunas vetustenses no pueden afirmar con la misma dignidad) decide voluntariamente realizar una prueba de fe.
Las vetustenses, infieles y envidiosas, ven la muestra de fe como un espectáculo lamentable que de nada servirá para limpiar la imagen de Ana, ni para hacer que se sienta mejor. Ansían la corrupción de la Regenta, pues si ellas pudieron mancharse cayendo en la vulgar tentación que iba a impedir que Ana también lo hiciera.
Se nombra al Regente, Víctor Quintanar, como un pobre calzonazos incapaz de controlar a su mujer. Comparando Visitación a Quintanar con los hombres de La isla de San Balandrán, zarzuela de este mismo siglo cuya trama se basaba en una isla regida por mujeres, en la que los hombres que llegaban eran puestos a cargo de tareas históricamente “de mujeres”.
Para estas mujeres la devoción no tenía nada que ver con demostrar fe, sino más bien con aparentar tenerla y hacer cosas como: “pedir para el Hospital a las corporaciones y particulares a las puertas del templo, regalar estandartes bordados a la parroquia”.
Por si fuera poco no solo va a participar en la procesión la Regenta, sino que lo va a hacer vestida de nazareno y con los pies descalzos, con el mal tiempo que estaba haciendo en Vetusta, esto a Obdulia le reconcomía por dentro pues ciertamente la Regenta se iba a dar el espectáculo y todos estarán  mirándola a ella, sería el centro de atención una vez más con una acción intachable.

Petronila mientras las tres damas blasfeman sobre las condiciones y el futuro espectáculo intenta mantener a raya el coloquio desde su postura religiosa, rendida ante el valor de Ana, quien iba a exponerse a las burlas descalza como Jesucristo lo hizo por los pecadores.
Entretanto entraban en la habitación Víctor y el Marqués. Quintanar decaído no solo por lo que iba a acontecer pues creía que había vencido al misticismo y que el Magistral estaba ya fuera de sus vidas, es advertido de que Ana irá descalza a la procesión y colérico decide irse a su casa sin cruzar explicaciones con su mujer.
Quintanar representa una España aristócrata contra una nueva sociedad que lucha por la salida de la iglesia de los hogares, por que desaparezca la intrusión y privilegios del clero en una España en la que la burguesía se alzaba y ponía su ideología liberal al poder del país.
La Regenta se hallaba arrepentida de la promesa que había hecho con el candor por recuperar la confianza del Magistral y desearía no ser capaz de cumplirla.
Al final no llovió y la Regenta se dio el espectáculo, el Magistral reafirmó su posición de control de Vetusta pero no sería durante mucho tiempo.
La novela critica con dureza a los conservadores, a los liberales, a una parte del clero, etc. Toda la sociedad es puesta en tela de juicio. En esta ciudad dominan la envidia, el ascenso al poder, la superficialidad y el vox populi vox Dei. Todo ello a través de un estilo indirecto libre.

jueves, 5 de junio de 2014

Romanticismo. El estudiante de Salamaca y un cuento



El romanticismo presente en El estudiante de Salamanca y uno de los cuentos sobre el Romanticismo. La muerte

Hablamos de un gigantesco poema de la noche y la muerte, desarrollado entre medianoche y el amanecer. Es la máxima expresión de la muerte terrorífica, desesperada, opuesta al conformismo, a la aceptación cristiana del cuatrocientos. Se encuentra en el poema de Espronceda el espíritu de rebeldía de las canciones, el color local de los poemas bardos, y una concepción especial romántico-tradicional del amor. Espronceda cambia la forma de la leyenda del don Juan a su gusto.
Entre los planos de la expresión y del contenido encontramos un paralelismo con unos valores singulares, es por eso que es fácil establecer en esta obra la correlación entre significante y significado,  toda la expresión y contenido vienen determinados por el clímax romántico del poema. La búsqueda de los tópicos románticos se manifiesta en las correlaciones entre los niveles expresivos y narrativos.  Además de esto, el nivel léxico de la obra tiene una riqueza que es poco frecuente en la poesía del romanticismo español. En lo que a adjetivación se refiere, las sensaciones del entorno se reflejan a lo largo del poema, predominan las visualizaciones plásticas de los colores (sombrío, blanco, oscuro, claro).
Sus dos protagonistas siguen corrientes de adjetivos que los definen perfectamente, la protagonista Elvira es un ejemplo de tristeza, infelicidad, desdicha, abandono amoroso. Pero al lado de todo esto, del moribundo corazón, del fúnebre llanto de amor, también las cosas se matizan de tristeza, la luna es calificada de melancólica, el sonido del arpa también es melancólico. Patios yerbosos, tristes y húmedos. Al otro lado está el temperamento del héroe, calificado con adjetivos que expresan apasionamiento, odio, rebeldía.  En definitiva como los adjetivos construyen una visión del mundo espectral, que expresan horror, lleno de tonos sombríos. Adjetivos aplicados a danzas de espectros, una visión del propio entierro… Espronceda se esfuerza por crear un ambiente tenebroso, siniestro para presentar a los personajes. Juega con elementos decorativos románticos como la apertura del poema que sucede a medianoche, con sonidos tenebrosos como aullidos de perros, entrechocar de espadas, lamentos agudos, etc.   En definitiva un léxico poblado de términos que reflejan el espíritu de la época y los paisajes que rodean la historia, oscuridad, ilusión, melancolía… Sinceridad a la hora de expresar sentimientos. En la métrica destaca la polimetría de este poema, en los temas el amor ocupa el lugar central , siempre apasionado y desdichado, la angustia por la muerte, la lucha entre el individuo y el mundo que lo rodea. Este poema narrativo de Espronceda destaca especialmente dentro del romanticismo pues Don Félix de Montemar recrea al héroe satánico que se open a cualquier limite que se interponga entre su libertad y él, sin preocuparse por lo que pudiera venir después, le suceden cosas de lo más disparatadas y lúgubres, desde presenciar su propio entierro hasta ser obligado a casarse con el esqueleto de Elvira tras su conquista.


EL ESTUDIANTE DE SALAMANCA. Edición de Benito Varela Jácome. 26ª ed. de José de Espronceda. Madrid. 2010. Cátedra. Letras Hispánicas, 6.

«Una nariz», en La Alhambra III (1840), pp. 294-297. [En Borja Rodríguez Antología del cuento romántico]

En este cuento el romanticismo está presente a través del tema principal que es el amor y la imposibilidad de llevarlo a cabo por cuestiones religiosas. Es un amor imposible pues viviendo en España los protagonistas profesan religiones no solo diferentes sino también en lucha. Ella, seguidora de la religión de Mahoma no podría estar con nadie que no siguiera su misma religión, él al enterarse por su boca, emprende un viaje de autodestrucción personal y física que desemboca en su propio deterioro, sin obtener nada a cambio. La imposibilidad del amor lo vuelve loco. No encontramos aquí el exotismo de los paisajes y escenas típicas del romanticismo, tampoco el vocabulario oscuro y tenebroso de El estudiante de Salamanca pero con el tratamiento de la temática y el exotismo que aporta el choque entre religiones es suficiente para captar el carácter romántico del cuento.

Poesía siglo XVIII. Tres muestras



A Pedro Romero, torero insigne. Nicolás Fernández de Moratín

Lo que más llama la atención de la actitud de Moratín padre en su poesía, es la combinación del sentido academicista y el gusto por determinadas fiestas populares. Se ajusta perfectamente su ideología a las bases del despotismo ilustrado, ya que a pesar de tener una capacidad reformista defiende al poder de las críticas de los más agitadores. Tradicionalismo y reformismo se ponen de manifiesto en parte de su obra, frente a las cuestiones de su tiempo, de ahí su entusiasmo por los toros.  Encontramos en él contradicciones y aciertos de una época que intenta reformar la sociedad pero sin cambiar los intereses y valores heredados del pasado.
Su fama como poeta se asienta con dos poemas de tema taurino, el primero Fiesta de toros en Madrid y el segundo Canción a Pedro Romero, torero insigne.  Va a ser este segundo poema el que utilizaremos como objeto de análisis. Se trata de una silva de rima libre, compuesta por versos endecasílabos y heptasílabos. El tema taurino está presente a través del homenaje a Pedro Romero, dicho homenaje se inspira en los epinicios de Píndaro.  Encontramos en el poema símbolos de renovación poética que se corresponden con la sensibilidad del Rococó, mundo refinado y frívolo pero que convive con los temas útiles que se impondrán en la poesía ilustrada. Encajamos en esta tendencia el poema pues todavía no llega a la doctrina ilustrada, las alusiones mitológicas están presentes en casi todo el poema y la musicalidad no se aleja de los versos, muy distantes todavía del prosaísmo ilustrado también. 
El contraste entre la fiesta popular y las alusiones cultas a mitos clásicos perjudica a la expresividad del conjunto del texto, que parece todavía ligado a la tendencia barroca, no reduce la nota mitológica a dimensiones domesticas y familiares como sucederá en los años venideros. Es por eso que lo más logrado del texto es la descripción que hace de la faena del torero donde abandona Moratín durante algunos versos la mitología antigua. El lenguaje es muy sensual aunque más simplificado y aligerado que en el Barroco.

Letrillas. A unoslindos ojos. Juan Meléndez Valdés

Meléndez Valdés, con talento poético pero “sin fuerza creadora ni originalidad rigurosa”, de tendencia afrancesada, es el autor en el que mejor conviven las tendencias rococó, neoclasicismo ortodoxo y heterodoxo.
Este poema de temática amorosa está compuesto por metros cortos. Cargado de adjetivos y descripciones sensuales que hacen rebosante de sensualidad las bellezas de la amada.
Utiliza un paisaje estilizado, amable e intrascendente que sirve de escenario para la evolución de las amadas, pero del que no se dan detalles físicos sino que está “en el aire” solo atento a la descripción de los atributos de la mujer. Se observa aquí también un cauce retórico por el que se expresan sentimientos sinceros y personales de manera pudorosa pero sin el psicologismo romántico. Podemos ver en este poema como la sensibilidad rococó no desaparece aun cuando dominan otras direcciones de la lírica ilustrada que utiliza formas más amplias y un lenguaje menos musical y sensorial, con temas de más trascendencia.
Vemos en Meléndez Valdés cuando repite el estribillo  <<tus lindos ojuelos me matan de amor>>  este concepto afín a lo pequeño, infantil e inocente representa un ingrediente de la estética rococó que es la miniatura y lo íntimo.



En alabanza de uncarpintero llamado Alfonso. Nicasio Álvarez de Cienfuegos

La poesía de Cienfuegos se mantiene dentro de los márgenes del último Neoclasicismo, pero evidencia ya un afán por romperlos. La llama ilustrada cobra en Cienfuegos un tono sentimental y se aproxima cordialmente a las realidades humildes, a los trabajadores y al pueblo, es precisamente esto lo que le ha dado el calificativo de poeta social, y es sin duda a partir de este poema el texto que permite llegar a esa conclusión.
En esta alabanza, el poeta con mucho atrevimiento para su época se interesa por el trabajo manual e incluso canoniza al protagonista del poema como Santo Alfonso que cae y desfallece de hambre mientras a su alrededor la nobleza se reparte las riquezas y se queja de vicio. Esto no es más que un reflejo de la filantropía a la que había llegado la mentalidad ilustrada, llena de cinismo queda plasmada con melodramatismo en este poema.
Parte el poema de una cita de Séneca que dice que la virtud sepuede encontrar en las manos callosas. En la métrica los versos son cada vez más largos quedando patente la tendencia al prosaísmo que tanto triunfa en el neoclasicismo heterodoxo.
En el poema podemos ver como la virtud misma está llamando porque nadie se ocupa de ella y el poeta para vengarla, alzará mil tempestades y le construirá templos.
La palabra clave es la virtud, que con la misma raíz latina que la palabra fuerza quedan representadas en la sociedad estamental con el noble: la nobleza quien está desposeída de virtud, está ociosa.  Es por eso que la virtud huye.
Haciendo uso del tópico del menosprecio de corte y del noble inútil, tiene también crítica para Dios pues, si este es padre de todos como es posible que solo los poderosos usurpen el poder y nublen la verdad.

Vemos en estos tres poemas la evolución de la poesía del siglo XVIII. Como avanza desde una lirica vacía, musical, versificada y adornada con temas grecolatinos, a una poesía de denuncia social y prosaica, pues era la prosa según decían el único medio de transporte posible para la verdad.